Plena inclusión tiene el compromiso
de acompañar y dar apoyos
a las personas con discapacidad
intelectual o del desarrollo
y sus familias para que desarrollen
sus proyectos de vida.
Este compromiso está escrito
en la Misión de Plena inclusión
y en su Plan Estratégico número 5
de 2016 a 2020.
Atender, educar y dar apoyo
a las personas con discapacidad
intelectual o del desarrollo,
es un tema de Calidad de Vida,
de Salud y de Derechos.
La sexualidad es una parte importante
de la vida de todas las personas.
También para las personas
con discapacidad intelectual
y las personas con más
necesidades de apoyos.
Las personas necesitan:
- Conocerse y aprender sobre su cuerpo,
sus genitales y su sexualidad. - Aceptarse como hombres, mujeres, homosexuales,
bisexuales o heterosexuales
y sentir que las demás personas les aceptan tal y como son. - Expresarse a gusto con intimidad
y las relaciones personales,
sin sentir que las conductas sexuales son obligatorias.
Por todo esto, Plena inclusión plantea algunas propuestas básicas
para respetar a las personas y su entorno.