Javier Torregrosa es miembro
de la Red Española de Aprendizaje
y Servicio.
Es una red que propone como
repuesta educativa que los alumnos y alumnas
se comprometan a participar en
proyectos solidarios, desde sus conocimientos
o valores.
En esta entrevista realizada por
Fermín Nuñez Javier Torregrosa
explica:
Que es una método activo y que el aprendizaje
al servicio se acerca a la comunidad de manera
sencilla y practica.
Los premios de la Red se iniciaron
hace 5 años y se han presentado
muchas prácticas que
reconocen la labor de los
centros educativos y entidades sociales.
Con esta iniciativa anima a la gente
y a los centros a que se sumen a esta iniciativa.
Uno de estos proyectos
es un programa de Transición a la Vida
adulta de Asprona Almansa.
Anima a los formadores y cuidadores a
que se formen ya que puede ser útil
al alumnado del centro.
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Entrevista a Javier Torregrosa, miembro de la Red Española de Aprendizaje-Servicio
Por Fermín Núñez. Plena inclusión España
La Red Española de Aprendizaje-Servicio (REAS) pretende promover una propuesta educativa donde el alumnado identifica en su entorno próximo una situación con cuya mejora se compromete, desarrollando un proyecto solidario que pone en juego conocimientos, habilidades, actitudes y valores. Javier Torregrosa es docente y uno de los impulsores de esta Red con la que colabora Plena inclusión.
¿Puedes explicarnos en qué consiste el aprendizaje-servicio?
Es una propuesta educativa que recoge la tradición de las metodologías activas; el aprendizaje a través de la experiencia y la acción al servicio de la comunidad, concretándolos en una metodología práctica y sencilla al alcance de la escuela o de cualquier entidad social.
¿Cómo surgió la iniciativa de convocar estos premios y con qué objetivo?
Los premios se iniciaron en 2015 y en estos 5 años se han presentado más de 1100 experiencias realizadas. Cuando surgieron nos proponíamos: reconocer la labor de los centros educativos y entidades sociales; reconocer las prácticas de aprendizaje-servicio como herramienta de éxito educativo y compromiso social; y Fortalecer y difundir una cultura participativa, solidaria y de compromiso cívico.
¿Por qué decidisteis crear una categoría de "inclusión" en los premios? ¿Hay algún proyecto que os haya sorprendido hasta ahora en esta categoría?
El tema de la inclusión es algo que está cada vez más arraigado en muchos centros educativos. Vimos que muchos de los proyectos presentados estaban relacionados con la inclusión y eso fue lo que nos llevó a buscar un patrocinador para esta categoría. Con este premio ponemos en valor el trabajo que ya se está haciendo y animamos a que más centros se sumen al ApS. Entre los proyectos presentados recuerdo uno muy interesante del Centro de educación especial Asprona de Almansa, en el que chicos y chicas de un programa de Transición a la Vida Adulta pusieron en marcha huertos escolares en centros educativos de primaria y secundaria, involucrando a entidades locales públicas, iniciativas particulares y organizaciones solidarias y fomentando la producción y consumo de alimentos saludables y variados.
¿Qué les dirías a los centros y organizaciones de Plena inclusión para animarles a participar?
Ante todo que las personas educadoras y el profesorado se formen en esta metodología. Plena Inclusión junto con la Red Española de Aprendizaje Servicio han diseñado un curso online que ya está a disposición de los grupos territoriales. Pienso que esta metodología, siendo útil para cualquier alumno o alumna, es extraordinariamente válida para aquel alumnado con necesidades educativas especiales. El que ellos se sientan protagonistas de un proyecto que además de aprender, mejora la realidad social de su entorno, es estupendo y es la mejor manera de hacer real la inclusión. Todos somos capaces de hacer cosas para mejorar nuestro mundo.
El año pasado reunisteis a un montón de centros en la entrega de premios.. ¿Cómo vais a hacerla este año con la situación que vivimos?
La entrega de los Premios ha sido itinerante. Ha pasado por Valencia, Gijón, Hospitalet del Llobregat, Coslada y Pamplona. Han sido encuentros con una gran participación de Centros y Entidades. Este año se realizará en Cáceres, aunque las circunstancias nos llevan a hacerlo de forma online. Los Premios se mantienen y a pesar de los inconvenientes contamos con la ventaja de que el acto puede llegar a muchos más centros educativos que se podrán conectar.
¿Qué impacto crees que puede tener la nueva situación generada por la pandemia en el aprendizaje-servicio en el nuevo curso?
Ciertamente que estamos en una situación muy difícil para la organización de los centros educativos y para el desarrollo de las materias. Pero el ApS además de ser muy creativo tiene un alto nivel de elasticidad ya que se puede aplicar a situaciones muy diversas.