Tener una vida digna y de calidad también pasa por tener buenos apoyos. Dar buenos apoyos implica que éstos sean elegidos y deseados por la persona; sean diseñados y gestionados respetando su voluntad y voz; contribuyan a su participación, a que la persona elija qué le gusta y qué le hace feliz, dónde quiere vivir, en qué quiere ocupar su tiempo de ocio, o con quién quiere relacionarse.
Sofía Reyes: «Esperemos que nuestros barrios sean lugares donde estemos todas las personas, donde la diversidad se celebre como un valor»
